jueves, 14 de junio de 2012
Cerebro
Todo puede estar mejor, y no es solo cuestión de querer, es cuestión de hacer.
martes, 10 de abril de 2012
Reformas
llego a casa, me hace sentir que alguien necesita de mi, que puedo hacerme responsable de algo. No solo el afecto de amo-mascota volvió, porque desde que era muy niño no tenía una, si no que también apareció una compañía más agradable, alguien con quien no me puedo enojar y no tengo vergüenza de ser transparente. Con mi hermana no paramos de discutir, mi humor es inestable cuando está ella cerca, soy tan bueno con todo el mundo que con alguien tengo que descargar la ira que me genera callar mis problemas. Ir a la psicóloga no me está sirviendo de nada, porque me enoja que piense que siempre tiene la razón, y eso hace que no me sienta cómodo con ella. Solo le cuento al rededor del treinta por ciento de mis problemas, no me sale abrirme más, no logro generar la suficiente confianza con ella. Pero de todas formas no puedo dejar de ir, me encariño muy rápido con las personas, por más que ellas no lo sepan y ni se note. Me disgustaría fallarle y no ir más, porque siento que ella se pondría triste, aunque obviamente no seria así. Siento una lastima horrible por muchas personas, pero lastima que me afecta a mi, es algo que me hace ver a las personas muy susceptibles y después eso termina resultando en que yo la pase mal. Quizás confíe en las personas equivocadas y desconfíe de las correctas.
Empecé las clases y eso me cansa mucho, no he parado de dormir, y como no soy bueno alumno, y nunca estudio ni hago deberes, tengo demasiado tiempo libre, que lo uso para comer, comer hasta excederme. A principios de marzo, tuve una pequeña intervención quirúrgica, que me detuvo de ir al gimnasio, y de mantenerme activo, esto sumado a que no paro de comer, está obviamente afectando mi cuerpo, por la tanto aumenta mi incomodidad conmigo mismo. Pienso que voy a tener tiempo para mejorar, para ponerme las pilas y trabajar en lo que quiero cambiar, pero paralelamente sé que el tiempo corre, y si no hago algo ya, no voy a obtener nada. Tengo las herramientas necesarias y las tengo que empezar a usar, pero la pereza hace que mi trabajo se retrase.
viernes, 16 de marzo de 2012
Después
viernes, 17 de febrero de 2012
J’ai Tué Ma Mère

jueves, 29 de diciembre de 2011
MMXI
Mi 2011 pasó desapercibido, quizás porque el año pasado ya estaba esperando que este pasara rápido, porque estaba ansioso por comenzar algo de nuevo, de ser nuevo en algo, así que me lo tomé a la negativa, y realmente saco pocas cosas positivas.
Emocionalmente, ni lloré mucho, ni reí mucho, ni estuve muy feliz, ni muy nervioso. Neutral.
Obviamente hubo cosas que me marcaron, cosas que aprendí, que conocí, personas, inspiraciones, música. Cosas que me hicieron aprender sobre lo que está pasando.
Traté de no dejar para mañana lo que puedo hacer hoy, y a veces lo llegué a lograr. Traté de no convencerme con poco, de exigirme más a mí mismo, sigo trabajando en eso de todas formas.
Me di cuenta de quienes son mi apoyo, en quienes puedo contar siempre. Supe distinguir quienes eran mis amigos y quienes desconocidos amigables. Me quedé con ganas de concretar algunas amistades, pero por diferentes motivos, no lo logré.
Lo más importante, me conocí formalmente a mí mismo, aprendí como funciono, como reacciono, puedo decir que me conozco.
Este año superé varias cosas, que me hicieron ver las cosas de otra forma, cosa que no sé si agradecer u odiar.
Mi autoestima no es la más fuerte, pero ha ido mejorando, no confío del todo en mi mismo, así como no confío del todo en los demás, pero noto una mejora.
No terminé del todo bien, académicamente hablando, por primera vez en mi vida me llevo materias, y una a febrero, y me preocupo y estreso mucho. Hay cosas que debería tomarme más a la ligera, creer que todo va a estar bien no me vendría mal. Tengo mis temores, aunque todavía no sé a qué son.
Cumplí un sueño, que fue el de conocer otro país. Puedo decir que lo mejor de este año, fue mi viaje a Inglaterra. Fue una de las mejores cosas que me han pasado, porque las personas que conocí allí, y los lugares, son algo que no cambiaría por nada.
En conclusión puedo decir que el 2011 fue un año de relajación para el alma, no muchas sorpresas ni muchas decepciones, un año que se balanceo bien, no fue para nada el mejor, es más, fue uno de los más feos, fue el que me hizo darme cuenta de lo rápido que pasa la vida y de lo mucho que hay que disfrutarla. Creo que es una suerte que me dé cuenta de esto siendo joven aun.
Voy a hacer lo posible para disfrutar este año que comienza, y espero que cuando diciembre de 2012 llegue, escribir una entrada llena de cosas positivas… si es que no se acaba el mundo antes.