jueves, 14 de junio de 2012

Cerebro

No sabés que estás haciendo, pero no te detenés a pensar que es lo que deberías hacer. Dejás que todo siga su rumbo y vos no lo impedís, tratás de sobre llevarla lo mejor posible, pero sabés que podría estar mejor si quisieras. Y querés, y pensás que mañana lo vas a hacer mejor, pero no va a ser así, hay algo que te tranca. Tenés planes, tenés proyectos, pero no sabés como llevarlos a cabo, no sabés como hacer que pasen. ¿Que es lo que necesitás para que todo salga como te lo propusiste? ¿Más tiempo? ¿Inspiración? Tiempo sobra y falta al mismo tiempo, por eso todo debería hacerse lo antes posible, para aprovecharlo mejor y no perderlo. Inspiración, casi la conseguís, solo tenés que seguirla buscando, aunque esa búsqueda no era consciente. Pero antes, ¿Sabés que es lo que querés? Estás muy entusiasmado con lo que crees que querés, pero ¿Estás seguro que es eso? ¿No vas a seguir explorando? A esta altura de tu vida nada es definitivo. Si al menos tenés un vistazo de lo que te gusta, explotalo, creá, no te limites a pensar lo que vas a hacer mañana. Hacé hoy, par acercarte más a saber que es lo que vas a hacer mañana. No tenés nada para perder, esa gente no te importa, solo te importa ese puñado de personas que algún papel tienen en tu vida. Lanzate, no tengas miedo, ¿que puede pasar? A lo único que le podés temer es a la muerte, a la vejez, porque es incierto si van a llegar en un momento en el que hiciste lo que quisiste con tu vida. Le tememos al futuro los que poca idea tenemos del presente.
Todo puede estar mejor, y no es solo cuestión de querer, es cuestión de hacer.

martes, 10 de abril de 2012

Reformas

De hábitos, de reacciones, de actividades. En diciembre del año pasado apareció alguien que cambiaría mi vida, que me alegraría un montón, mi gata Olga. Olga es lo que más quiero ver cuando
llego a casa, me hace sentir que alguien necesita de mi, que puedo hacerme responsable de algo. No solo el afecto de amo-mascota volvió, porque desde que era muy niño no tenía una, si no que también apareció una compañía más agradable, alguien con quien no me puedo enojar y no tengo vergüenza de ser transparente. Con mi hermana no paramos de discutir, mi humor es inestable cuando está ella cerca, soy tan bueno con todo el mundo que con alguien tengo que descargar la ira que me genera callar mis problemas. Ir a la psicóloga no me está sirviendo de nada, porque me enoja que piense que siempre tiene la razón, y eso hace que no me sienta cómodo con ella. Solo le cuento al rededor del treinta por ciento de mis problemas, no me sale abrirme más, no logro generar la suficiente confianza con ella. Pero de todas formas no puedo dejar de ir, me encariño muy rápido con las personas, por más que ellas no lo sepan y ni se note. Me disgustaría fallarle y no ir más, porque siento que ella se pondría triste, aunque obviamente no seria así. Siento una lastima horrible por muchas personas, pero lastima que me afecta a mi, es algo que me hace ver a las personas muy susceptibles y después eso termina resultando en que yo la pase mal. Quizás confíe en las personas equivocadas y desconfíe de las correctas.
Empecé las clases y eso me cansa mucho, no he parado de dormir, y como no soy bueno alumno, y nunca estudio ni hago deberes, tengo demasiado tiempo libre, que lo uso para comer, comer hasta excederme. A principios de marzo, tuve una pequeña intervención quirúrgica, que me detuvo de ir al gimnasio, y de mantenerme activo, esto sumado a que no paro de comer, está obviamente afectando mi cuerpo, por la tanto aumenta mi incomodidad conmigo mismo. Pienso que voy a tener tiempo para mejorar, para ponerme las pilas y trabajar en lo que quiero cambiar, pero paralelamente sé que el tiempo corre, y si no hago algo ya, no voy a obtener nada. Tengo las herramientas necesarias y las tengo que empezar a usar, pero la pereza hace que mi trabajo se retrase.

viernes, 16 de marzo de 2012

Después

Yo estaba bien, más que bien, en el momento no lo supe valorar. Cuando terminó me di cuenta de que no me había sentido así hacía mucho tiempo, y tampoco entendí porque terminó. Era lo que necesitaba, me hacía sentir como si hubiera logrado algo importante, me hacía sentir acompañado y feliz. Justo cuando terminó pasó algo en mi vida en donde necesitaba compañía, pero no la tuve, porque decidió ignorarme, y lo sigue haciendo. Espero algún día saber que pasó, pero todos somos orgullosos, por eso casi nunca las historias tienen una conclusión concreta.
Ya lo había superado antes, y no me costó hacerlo de nuevo, pero fue más difícil esta vez, porque al final tenía lo que quería y me gustaba.
Extrañar esa sensación, la extraño, pero puedo arreglarme sin ella.

viernes, 17 de febrero de 2012

J’ai Tué Ma Mère


Una película también de Xavier Dolan, como Les Amours Imaginaires.
En los últimos meses me han dicho varias personas de ver esta película, y ha estado bastante presente en mis opciones, pero no fue hasta el otro día que decidí buscarla y bajarla. Pasó dos días en mi disco duro, y si les soy honesto, estaba esperando a alguien para que la viera conmigo, y como nadie apareció, la vi, porque no me aguantaba más.
Un día escuché a alguien decir que una película equis no tenía desperdicio, y esta es como esa película equis.
Yo maté a mi madre, es una explosión de sentimientos; odio, ira, amor, pasión, felicidad. Pero el que está más presente es el sentimiento hacia la figura maternal.
Este post va dedicado a la gente joven que no soporta a su madre, la que hace que nos saquemos de quicio, la que nos arruina nuestros planes, la que nos obliga a hacer cosas que no queremos. A mí por suerte/desgraciadamente no me toca vivir esto, porque vivo con mi hermana, pero créanme que no es muy diferente la relación.
En este caso, me puse en el lugar de las madres, solo para entender que es lo que pasa por sus mentes cuando nos hacen enloquecer.
Muchas de ellas, aferradas a la juventud, siguen siendo jóvenes, al menos en su forma de ser, y a veces se detienen a preocuparse exageradamente por nuestras simples cuestiones, y nos dejan a nosotros mismos de lado.
Creo que habría que ser madre para entender lo que pasa por las mentes de nuestras creadoras, pero pienso que es como cuando tenemos a una mascota, la queremos muchísimo, y la intentamos adaptar a nuestra forma de vida, eso es lo que hacen ellas, pero solo que, como nosotros somos seres inteligentes, podemos rechazar sus normas.
Si generalizamos, porque hay madres que realmente ni deberían ser consideradas como una, su amor va casi exclusivamente a nosotros, somos como su objeto más preciado, no van a dejar que absolutamente nada malo nos pase, pero al no ser dependientes de nosotros, puede que a veces estén cansadas o interesadas en otras cosas como para darnos su completa atención.
Yo no me críe con una madre, ni con un padre, pero más o menos conozco el sentimiento, porque tengo tías que jugaron ese papel maternal conmigo.
Les recomiendo mucho esta película, del estilo de Les Amours Imaginaires, así que si conocieron esa película por mi entrada y la vieron, vean esta también.
P.D. Esto lo empecé a escribir hace meses, pero recién hoy (17/02) lo terminé. Disfruten.